La estafa de las modelos curvy

¿Son las modelos ‘curvy’ una estafa?
Se ha desatado la polémica: ¿estamos ante una estafa de las marcas de ropa con las populares modelos ‘curvy’?


Una de los mayores debates en el mundo de la moda es el peso de las propias modelos. Después de una época donde destacaron los cuerpos tonificados y atléticos, llegó otra donde lo que se buscaba era la delgadez extrema, casi rozando la enfermedad. Después de muchas críticas, las marcas decidieron mirar más a la calle y darle su espacio a las mujeres con una talla 42 o superior, pero, ¿son realmente estas modelos ejemplos de tallas grandes?




Ashley Graham, Candice Huffine (la primera modelo XL en posar para el mítico Calendario Pirelli), Tara Lynn (portada entre otras publicaciones fashion como Vogue Italia y Elle) y Robin Lawley son las máximas exponentes de la modelo ‘curvy’.



¿Pero dónde está el problema? El debate nace cuando muchas de estas modelos tienen una talla 40/42 y las marcas las venden como modelo de talla grande. Hay muy pocas que puedan decir que tienen una talla 48, ya que todas miden 1.72 o más.



Entonces, ¿una modelo que mide 1.74 y pesa 86 kilos debería ser considerada una modelo de talla grande? No, y es precisamente lo que intentan vender las marcas y donde nace la estafa, porque una modelo de tallas grandes siempre debería vestir mínimo una talla 46/48.